Las cejas juegan un papel esencial en la armonía del rostro, ya que no solo enmarcan la mirada, sino que también influyen en la expresión de las emociones.
Sin embargo, factores como la edad, cambios hormonales, enfermedades autoinmunes o incluso cicatrices pueden hacer que el vello en esta zona se vuelva más escaso o desaparezca por completo.
Para quienes buscan unas cejas bien definidas sin necesidad de maquillarlas todos los días, una de las técnicas más populares actualmente es el Powder Brows, una solución semipermanente que garantiza un acabado natural y sofisticado.
Procedimiento Powder Brows
Las Powder Brows son un procedimiento de micropigmentación que simula el efecto del maquillaje en polvo, proporcionando cejas con mayor densidad y un acabado difuminado.
Esta técnica utiliza un dermógrafo para depositar pigmento en la piel mediante micropuntos, logrando un degradado suave con menor intensidad en la parte interna de la ceja y un color más definido hacia el extremo.
Esta técnica es ideal para quienes desean un efecto de cejas maquilladas sin necesidad de retoques diarios.
Además, funciona especialmente bien en pieles grasas.
El tratamiento suele durar aproximadamente 2 horas, y tras la primera sesión, es necesario un retoque después de 4 a 6 semanas para perfeccionar el resultado. Una vez completado el procedimiento, el efecto puede durar entre 12 y 18 meses, dependiendo del tipo de piel y los cuidados posteriores.
Para mantener el aspecto impecable, se recomienda un retoque anual.
¿Vale la pena hacerse Powder Brows?
Si buscas unas cejas definidas, con volumen y un efecto de maquillaje natural sin la necesidad de maquillarlas cada mañana, el Powder Brows es una excelente alternativa. Con un mantenimiento mínimo y resultados duraderos, esta técnica es perfecta para quienes desean realzar su mirada sin esfuerzo.
Si estás considerando este procedimiento, asegúrate de acudir a un especialista con experiencia para obtener los mejores resultados. ¿Te animas a probarlo?